“Touching and physical contact is very dangerous territory”
El abrazo como expresión de cariño o amistad entre los jóvenes americanos es casi portada del New York Times.
Se está extendiendo la costumbre de abrazarse entre los amigos en el instituto, cuando se ven, cuando se despiden, cuando se encuentran. Muchos adultos, criados y anquilosados en el puritanismo que ha acartonado a ésta sociedad, no ven con buenos ojos la predisposición que tienen sus hijos de contactar fisicamente con sus amigos. La autora de la frase de arriba, es directora de un instituto de NJ, (no de la america profunda), que ya hace dos años se rasgó las vestiduras y prohibió todo tipo de abrazo entre sus alumnos. No es la única y a esta directora le han secundado unos cuantos más.
Veo a María con sus compañeros abrazarse, y me encanta. Luego, eso si, le reclamo mi racíon también. Pero es cierto que lo suelen hacer los hispanos y en su instituto no es normal.
Yo ando todo el día reprimiendo la mano que tenía habituada a tocar antebrazos, brazos, cinturas y demás, pues aquí no puedes. Y echo de menos las caricias, abrazos y besos entre los amigos. Y me encanta que los hombres se saluden con un beso, o dos. Y me encantaba que la "dire" del cole de mis niños, cuando me veía, me besaba.
Espero que esa buena costumbre, no haya desaparecido a mi regreso.
Se está extendiendo la costumbre de abrazarse entre los amigos en el instituto, cuando se ven, cuando se despiden, cuando se encuentran. Muchos adultos, criados y anquilosados en el puritanismo que ha acartonado a ésta sociedad, no ven con buenos ojos la predisposición que tienen sus hijos de contactar fisicamente con sus amigos. La autora de la frase de arriba, es directora de un instituto de NJ, (no de la america profunda), que ya hace dos años se rasgó las vestiduras y prohibió todo tipo de abrazo entre sus alumnos. No es la única y a esta directora le han secundado unos cuantos más.
Veo a María con sus compañeros abrazarse, y me encanta. Luego, eso si, le reclamo mi racíon también. Pero es cierto que lo suelen hacer los hispanos y en su instituto no es normal.
Yo ando todo el día reprimiendo la mano que tenía habituada a tocar antebrazos, brazos, cinturas y demás, pues aquí no puedes. Y echo de menos las caricias, abrazos y besos entre los amigos. Y me encanta que los hombres se saluden con un beso, o dos. Y me encantaba que la "dire" del cole de mis niños, cuando me veía, me besaba.
Espero que esa buena costumbre, no haya desaparecido a mi regreso.
2 comentarios:
No se ha perdido la costumbre. Cuando lleges te dare un abrazo enorme para demostrártelo.
Eso forma parte de nuestro caracter mediterraneo, como el aceite de oliva. Hay cosas que no pueden cambiar, y es algo que podemaos intentar exportar
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