lunes, 27 de octubre de 2008

MAS COSTUMBRES RARAS


Cuando ésta mañana María y yo, llegábamos a su instituto hemos dado un grito de horror.
Que la gente, en U.S.A. y especialmente el sexo femenino no tiene querencia por la moda, no tienen gusto y visten fatal, pues ya lo sabíamos. El grito ha salido de nuestras gargantas a unísono al contemplar a una jovencita llegar al instituto con "pantalones de pijama". El horror se ha tornado sorpresa y luego en risa, cuando hemos comprobado que no era esa chica la única; había más de 50 jóvenes, ellas y ellos, con pijamas y pantuflas.
Luego he recordado que ésta semana, no se si por ser Halloween o qué, en cada cole tienen un día especial de vestimenta, pijamas, pantuflas, sombreros, ropa roja, etc... De ésta manera, ya desde bien pequeñitos les enseñan a deshinibirse en sus comportamientos.
No sé si la consecuencia de éste comportamiento , es lo que luego dicen las estadísticas:
  • el 26% de los jóvenes que terminan el "bachillerato", es incapaz de entender un texto , despúes de haberlo leído.
  • el 56% de americanos, creen en la intervención divina para mejorar una enfermedad, a pesar de que los médicos hayan desahuciado al enfermo.
  • el 57% de americanos, están convencidos de que Jesucristo va a descender a la tierra para salvarlos.(¿donde? en USA, claro)

CAMBIO DE HORA

Ahora solo tenemos 6 horas de retraso respecto a España.
Son las 19h en Plano, empieza a oscurecer y en el jardin de casa el viento hace susurrar a las hojas en los árboles, la temperatura desciende a los 24º, y los mosquitos a pesar del repelente, me acribillan.
Cristina se moja con la manguera y Carlos pisa bellotas de camino a la canasta, mientras emula las hazañas de sus héroes. Héroes que como comprobamos ayer, son bastante accesibles, de andares extraños, campechanos, y simpáticos. Carlos cambia el objetivo de sus tiros, y va tras los mosquitos, pero son pequeños y se mueven rápido. Mejor regresar al partido.
Las ardillas se han ido a dormir y en su lugar empiezan a salir las liebres, siempre pequeñitas, no se si a las grandes se las comen o que son de raza enana. En cualquier caso, no se vende carne de conejo.
Plano es una ciudad realmente plana y lisa; no hay montañas, ni colinas, algún montículo, ni edificios. Me gustaría auparme en lo alto del árbol de casa y contemplar el rojo atardecer, como se torna en violeta y oscuro, contemplar sin impedimentos como viajan los cientos de aviones que nos surcan a diario.
Aviones. Baja el precio del petróleo, pero no bajan el precio de los vuelos. Una pasta. Todavía no tenemos los billetes para Enero. Si por Maria fuera, no volvíamos. Pero es la única. Los demás estamos diisfrutando mucho.
Cuantos grillos hay.

La que chilla, no soy yo.


miércoles, 22 de octubre de 2008

sábado, 18 de octubre de 2008

MIEDO

Siempre he sido una miedosa. Miedo a la oscuridad (que largo me parecía el pasillo de casa de mis padres), miedo al terror (hay muy famosas peliculas que no he visto, ni pienso verlas), miedo escénico (mi corazón latiendo mientras interpretaba "Historia de una escalera").
Todos esos miedos, la edad, la vida, las experiencias, los van transformando en sensaciones desagradables, pero pasajeras.
Casi todas las tardes, mientras me deleito mirando los colores del atardecer, no puedo dejar de pensar en esos miles de pajaros que me persiguen y se paran también cuando un semaforo rojo detiene mi marcha. Y los escuchas gritar, y ves sus picos negros y puntiagudos pelearse por un trozo de alimento, y los grandes persiguiendo a los chicos, y vuelan las rapaces entre ellos. Cuantas noches de pesadillas me hizo pasar el Sr. Hitchcock.
Miedo el que tiene Cristina cuando vemos una ardilla por la calle, pues piensa que la podemos atropellar. Para mi es una sensación desagradable el contemplar sus cuerpos aplastados por las ruedas de los coches. Aqui se atropellan ardillas. Dentro de unos años, ya se habran extinguido. Como en España; no quedan ardillas, porque ya los romanos empezaron a atropellarlas con sus carros. En España sí que tenemos historia. Pero otro dia hablaré de las ardillas y de Calvino.

Era miedo. Miedo el comprobar cómo nos empezinamos en vivir una vida cómoda, nosotros, cuando a nuestro lado hay tanta gente que no puede ni vivir su vida, en muchos casos se le ha entregado una vida sin vida.
Miedo el ser cómplice de la pantomima que supone la presidencia del mundo, (ay McCain!, Ay Obama! ) cuando la prepotencia que muestra el gigante americano con sus vecinos del sur, es tán alarmante como perdonable para las buenas gentes de Europa. ¿De qué nos sirve sentirnos origen de la civilización moderna, cuando somos sordos, ciegos, cojos , mancos y mudos delante de nuestro admirado engendro?
Eso si que da MIEDO.
Y como ya he dicho, el miedo, con el paso del tiempo, se transforma en sensaciones.

miércoles, 8 de octubre de 2008

EL CELLO


Ayer día 7 de Octubre, un més después de empezar la asignatura de orquesta, Carlos y otros 57 compañeros de 6º,unos con violín, otros con viola, otros con cello y otros con bajo, nos deleitaron con un pequeño concierto en el que interpretaron 8 temas, primero solo con los dedos, después con el arco. Fantástico. La profesora , Mrs.Ewton, ha conseguido que algunos deditos desarrollen un gusto por la música envidiable. (Ay José Ramón)

Os muestro un poquito de lo que musicaron. La grabación no es muy buena, pero en directo, sonaba muy bien. Carlos dice que quiere un cello para Valencia, y que de tocar la flauta, como les obligan en el cole, nada de nada.


viernes, 3 de octubre de 2008

ONE BOP + THREE BOPS


Esta tarde he estado en el colegio de Cristina para celebrar lo que llaman "noche de matematicas en familia". Consiste en reunir a cuantos más niños mejor, alrededor de mesas donde los niños juegan a las matématicas, ayudados por profesores que les explican en qué consiste cada juego.
Un buen momento para hablar con las maestras, ver como se relacionan los niños y permitir que aprendan reglas y conceptos básicos, pero con una carcajada a ser posible.
Puede que realmente estemos en un lugar un tanto privilegiado, donde no hay ruido, todo es calma, tranquilidad y ardillas.
Como bien decía Cristina al escuchar a un coche tocar el claxon: "mamá, ese señor debe ser español, porque aqui todo es muy tranquilo". He de aclarar, querido Paco, que aquí NADIE toca el claxon, la gente espera paciente su turno y dejan pasar a los demás.
Esta tranquilidad, ahora queda dilapidada por el ruido de los dos candidatos a la vicepresidencia del mundo en todos los canales de la tele. Creo que me voy a leer.